Roberto Abdullah, vocal de Sí se puede en el distrito Suroeste de Santa Cruz de Tenerife, se congratuló hoy por la reapertura, ayer, de la fuente pública para abastecimiento de agua en El Tablero, después de que esta organización política denunciara el pasado mes de agosto que se habían cerrado sin previo aviso y sin justificación esta y otras del distrito.
Pese a que la empresa de aguas, Emmasa, y el Ayuntamiento justificaron el cierre de estas fuentes en el mal estado que presentaban, supuestamente por actos incívicos, Abdullah –que también es presidente de la asociación de vecinos El Tablero– defendió en todo momento que la fuente de este pueblo estaba en perfecto estado, como lo demuestra el hecho de que ayer se procediera a la reanudación de este servicio sin necesidad de realizar ningún tipo de obra.
El portavoz de Sí se puede lamentó la nefasta gestión del agua que realizan el Consistorio y la empresa privatizada. Un ejemplo de esta gestión es el cierre negligente de la fuente, que constituye la única posibilidad de acceso a un bien fundamental por parte de muchas familias y es imprescindible para personas sin recursos en un distrito como el del Suroeste, con altos índices de pobreza y de desempleo. Abdullah recordó hoy que la fuente de El Tablero es utilizada no solo por personas de ese pueblo, sino de El Humilladero y de La Gallega.
El corte de suministro en las fuentes el pasado mes de agosto contrasta con el hecho de que los gastos que realiza Emmasa para el riego de los ocho campos de fútbol del distrito superan los 33.000 euros anuales y que se hace con agua potable, y no con depurada, según información facilitada al vocal de Sí se puede por el Organismo Autónomo de Deportes.
Este corte de suministro en las fuentes públicas se produjo después de que el grupo de gobierno rechazara en el Pleno de mayo una moción de Sí se puede, a partir de una idea de la Asociación por la Rehabilitación del Parque Cultural Viera y Clavijo y la Plataforma por la Dignidad, para exigirle a Emmasa reducir drásticamente las pérdidas de agua que se producen en el proceso de suministro, que en los últimos años ascienden a un 20% del total, y destinar parte del ahorro a crear una red de fuentes de agua potable en todos los distritos del municipio.
