La Fundación Hogar Santa Rita atraviesa una situación delicada. Los costes de esta institución portuense para atender a casi 700 personas mayores, unas 400 de ellas residentes, de las que cerca de 40 no pagan por no disponer de pensión ni de capacidad económica suficiente, resultan muy difíciles de cubrir con los ingresos actuales. Con el fin de tratar de paliar esta situación, la Asamblea Ciudadana Portuense ha propuesto que el Ayuntamiento del Puerto de la Cruz firme un convenio de colaboración con la fundación que incluya una aportación económica anual.
David Hernández, portavoz de la Asamblea, considera “significativo” que la mitad de los ayuntamientos de la isla contribuyan económicamente al mantenimiento de las personas atendidas por el Hogar Santa Rita y que entre ellos no esté el del Puerto de la Cruz, a pesar de que hay 91 mayores portuenses entre los residentes, algunos sin pensión o con pensiones no contributivas. En este sentido, recuerda que “durante mucho tiempo el Ayuntamiento aportó recursos a la fundación”, pero que “esa ayuda fue suprimida hace seis años como parte de los recortes” llevados a cabo por la corporación municipal a raíz de la crisis.
Para Hernández, el mantenimiento de Santa Rita, la mayor residencia de toda España, implica “una gran responsabilidad para todas las instituciones de la isla, pero en particular para el ayuntamiento del municipio que la acoge”. El cuidado de las casi 700 personas mayores que atiende la fundación y el mantenimiento de los 360 puestos de trabajo que genera actualmente, señala, “depende en gran medida de los convenios de colaboración” con entidades públicas y privadas. “Incluso ayuntamientos mucho más pequeños que el nuestro y con menos de diez personas atendidas en el centro, siguen cumpliendo fielmente con los compromisos adquiridos en sus convenios, a pesar de las difíciles circunstancias económicas”, apunta Hernández.
El portavoz de la Asamblea Ciudadana Portuense, que llevará este asunto al próximo pleno municipal, lamenta que el Ayuntamiento portuense lleve “más de seis años sin colaborar con una fundación que hoy por hoy es imprescindible para asegurar el bienestar de muchas personas mayores del Puerto de la Cruz y del resto de la isla”, y sostiene que “es el momento de acabar con esta situación y recuperar las ayudas eliminadas en 2009”.
