Pedro Fernández Arcila, concejal de Sí se puede en el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, ha vuelto a pedir hoy, como ya ha hecho en varias ocasiones durante el presente mandato, una actuación urgente de mejora en la zona conocida como La Quebrada, en el barrio de María Jiménez, pues el peligro de desprendimientos que vienen sufriendo los vecinos desde hace años se ha agudizado tras las fuertes lluvias del pasado 19 de octubre.
Arcila añadió que no solo es necesario ejecutar de manera inmediata obras de mejora en La Quebrada, sino que el grupo de gobierno debe asumir el compromiso de redactar a medio plazo un plan especial para esta zona, dado que el Pleno acaba de aprobar una moción de Sí se puede para la realización de varios planes especiales en diferentes áreas de las laderas sur de Anaga, entre ellas este núcleo de población.
El concejal puso La Quebrada como un ejemplo más de la desidia a la que la Corporación somete a determinadas poblaciones del municipio, especialmente a las más humildes. “Año tras año, los vecinos de La Quebrada ven cómo el Ayuntamiento los relega al olvido pese a que este barrio ha presentado durante todo este tiempo graves desperfectos, ocasionados por una indeseada combinación de inoperancia municipal con episodios de lluvias fuertes”, señaló.
En diciembre del año pasado el portavoz de Sí se puede pidió al delegado de Obras de la corporación, Dámaso Arteaga, que interviniera de manera inmediata en la calle Lombardía para evitar un desplome que parecía inminente. Los vecinos llevan años reclamando obras de mejora para evitar la caída de la calle y del área de aparcamientos, pero los técnicos se limitan a inspeccionar la zona y no llevan a cabo proyectos de mejora, según denunciaron en aquella ocasión a la organización ecosocialista.
