Alternativa Sí se puede explica en un comunicado a la opinión pública que el Cabildo de Tenerife, como máximo responsable de la empresa de transporte público TITSA, ha procedido a suprimir todo tipo de bonificación en las líneas de guaguas que pasan por los Aeropuertos del Sur (111, 487) y del Norte (102, 107, 108), así como las que conectan ambos aeródromos (340). Así, después de haber procedido hace apenas una semana a la mayor subida de su historia, incrementando de golpe un 10 por ciento las tarifas de la totalidad de sus líneas insulares, TITSA elimina ahora también, pero sin avisar, la posibilidad de acogerse al porcentaje de reducción del bono en las citadas líneas.
Con una orientación similar, en las guaguas que suben al Parque Nacional del Teide desde Playa de las Américas (342) o desde el Puerto de la Cruz (348) quedó suprimida la posibilidad de utilizar el bono, resultando obligatorio el pago de la tarifa más cara y, por si fuera poco, en metálico. La organización ecosocialista canaria recuerda que estas líneas son utilizadas por visitantes turísticos que quieren conocer Las Cañadas, pero también por muchos deportistas de la Isla (montañeros, ciclistas, senderistas) y ciudadanos en general, que utilizan el transporte público para acceder a la Cumbre insular y disfrutar de la naturaleza. Estas personas se ven privadas de recibir la correspondiente reducción, debiendo pagar la tarifa completa aunque hayan adquirido y dispongan del bono en vigor. Según el portavoz insular de movilidad de Sí se puede, Rafael González, “hemos recibido las quejas de distintas personas usuarias de la guagua que, en este mes de agosto (y en general todo el año) aprovechan para caminar y hacer deporte. A la situación de paro y dificultades económicas que afectan a tanta gente se añade ahora otro obstáculo adicional, como si no hubieran ya pocos, para poder disfrutar del tiempo de ocio con actividades sanas, accesibles y baratas.”
Desde Sí se puede consideran que estos casos ponen otra vez de manifiesto la errática política de transporte público que sigue el Cabildo y, en particular, las directrices improvisadas y torpes que marca el responsable del área, Manuel Ortega. Intentando encontrar alguna lógica, los ecosocialistas suponen que lo que se busca ahora es sufragar con los visitantes turísticos ocasionales una parte del déficit de la compañía, después de haber puesto en práctica reducciones y aumento de tarifas en el conjunto de líneas que utiliza la ciudadanía insular. Si esto fuera así, los ecosocialistas argumentan que eliminar la bonificación en líneas supuestamente “turísticas” perjudica otra vez a la población local que también las utiliza, y resuelve muy poco el problema económico de la compañía, en la medida en que los visitantes ocasionales no suelen adquirir el bono, a diferencia de los usuarios del país.
Para el portavoz ecosocialista, Rafael González, “si lo que pretende Coalición Canaria es que los turistas contribuyan a sufragar el coste de las infraestructuras y los servicios que disfrutan durante su estancia (y no sólo el transporte, sino otros muchos, entre ellos la conservación del paisaje y el medio ambiente), lo que debería es promover desde el Gobierno de Canarias la implantación de una ecotasa turística, tal como hemos defendido desde Sí se puede en muchas ocasiones, y como se implantó en su momento en el también turístico archipiélago Balear.” Por otra parte, Sí se puede completa su propuesta alternativa defendiendo la necesidad de implantar una fiscalidad verde; según González, “en lugar de seguir improvisando recortes por aquí y por allá, y de mantener una política caótica de bonificaciones por colectivos (personas de la tercera edad, paradas, estudiantes, usuarias de servicios sociales, etc.) cada vez más precaria y cicatera, el Cabildo debe instar al Gobierno de Canarias a aplicar un impuesto verde al uso del transporte privado, derivando su recaudación al sostenimiento de los sistemas de transporte colectivo en todas las Islas. Ello permitiría, incluso en estos tiempos de crisis, mantener y mejorar en lo posible los servicios que prestan empresas públicas como TITSA, asegurando su viabilidad y eficacia. Y desterrar para siempre los sueños privatizadores que parecen tentar a su principal responsable, el señor Ortega”.
